jueves, 2 de febrero de 2012

Las Energías Renovables en el Medio Rural

En la Unión Europea cada vez adquieren más importancia los conceptos de Sostenibilidad, Competitividad y Seguridad de Abastecimiento, este último cuando hablamos de energía.

En las últimas décadas se ha generado un gran impulso de las llamadas Energías Renovables en nuestro continente, ya que permiten la reducción de la contaminación atmosférica y de los gases de efecto invernadero, junto con el desarrollo de las zonas rurales europeas, que ven en estas energías una fuente de empleo, del que se encuentran tan necesitadas ante el declive de la agricultura.

Tres tipo de renovables han evolucionado hasta hoy de forma importante: eólica, biocarburantes y biogás.
En nuestro país la que ha adquirido una mayor importancia es sin duda la Energía Eólica.
La Energía Eólica no contamina y por su procedencia es inagotable, a la que que su uso contribuye  a frenar el agotamiento de los llamados combustibles fósiles y a evitar el cambio climático.
Es una energía limpia, y por los costes de producción es una energía barata.

Pero también debemos valorar los impactos negativos que producen las instalaciones de Energía Eólica, como los impactos paisajísticos, ruido, consecuencias en las migraciones de determinadas aves...

1. La Energía Eólica y el Medio Rural:


Sobre los beneficios y los impactos negativos de las instalaciones eólicas en el medio rural, han existido y existen defensores a ultranza y verdaderos enemigos acérrimos de las mismas.
Es poco discutible el beneficio causado a ciertos Ayuntamientos y propietarios de tierras agrarias, que han visto en la energía eólica una fuente de ingresos que palia las desatendidas economías de los municipios  rurales.
Pero también es evidente para sus detractores, la existencia evidente de impactos sobre el paisaje o la amenaza para algunas aves.
El reto es compatibilidad ambos intereses.

El primer punto que debemos tener en cuenta es la ubicación de los aerogeneradores eólicos.
Parecería lógico situarlos en espacios destinados o calificados como industriales, lo cual no sería compatible desde el punto de vista de los rendimientos.
Por lo tanto, la ubicación de este tipo de instalaciones se determinará en la mayor parte de nuestras sierras y montañas, destruyendo así el paisaje, uno de los mayores patrimonios que poseen los pueblos o aldeas rurales.
Resulta contradictorio y paradójico, que zonas de poco valor paisajístico y con condiciones eólicas adecuadas, no puedan albergar estas instalaciones por carencia de líneas eléctricas de alta tensión.
Tal vez estemos empezando la casa, por el tejado en lugar de por los cimientos.

El segundo aspecto que parece cuestionable es el desequilibrio territorial que estas instalaciones producen dentro de una misma comarca y entre sus municipios.
El papel redistribuidor de los recursos regionales desempeñado en teoría por las CCAA, viene a paliar de alguna manera ese desequilibrio, con actuaciones en obras y servicios que permitan redistribuir entre todos los municipios regionales, los recursos procedentes de las empresas explotadoras de la energía eólica.

2. Recomendaciones de actuación en el futuro:


Parece obvio que las energías renovables deben ser la alternativa de futuro a las procedentes de los fósiles o a la energía nuclear.
La Energía Eólica parece ser la más adecuada en un corto plazo, pero hay que revisar algunos aspectos, los cuales se resumen en los siguientes puntos:


  • Realización de una planificación completa y rigurosa del territorio que evite la instalación en zonas de valor ambiental medio y alto.
  • Necesidad de la mejora de la red eléctrica nacional de alta tensión que permita  la instalación de parques eólicos en zonas de escaso valor ambiental y con recurso eólico importante.
  • Repotenciar los actuales parques eólicos con correcta ubicación y reubicar aquellos que provocan un atentado paisajístico o un peligro para la avifauna.
  • Promocionar el autoconsumo municipal a  través de este tipo de energía.



En la comarca de Caldas podemos encontrar instalaciones de energía eólica en sus principales montañas, pero, ¿se trata de una energía lo suficientemente beneficiosa para esta comarca?, ¿considerais que se está haciendo un uso y aprovechamiento correcto de la misma en la propia comarca?, ¿genera empleo para la población de la comarca, beneficia económicamente a los vecinos?...
Son preguntas que nos debemos plantear y pensar si existen otras energías limpias alternativas a la eólica que traigan más beneficios para la comarca, el pueblo y el medio ambiente, como es el caso de la energía solar, de la cual hablaré en mi siguiente entrada.